Voces contra la trata, comentario sobre Chicas Nuevas 24 Horas

Por Valentín García (@Gafolito)

No es una cuestión de mirar y pensar, sin hacer nada, en lo difícil de las situaciones que vemos pasar en la historia de historias del contundente documental de Mabel Lozano Chicas Nuevas 24 Horas sobre el negocio de la trata de personas.

Ya la palabra “trata” me lleva a pensar en trato, negocio, acuerdo…, pero solamente con el visto bueno de una de las partes, en este caso de las mafias que “tratan” con personas, con mujeres a las que engañan, explotan y esclavizan.

Al ver el documental te vas encogiendo, quieres “no ver” esta realidad, dura, cierta, que está ahí cerca, y sino basta mirar los “anuncios” que sigen estando en algunos periódicos que luego hablarán del documental como algo fundamental para luchar contra la trata. Eso se llama hipocresía y ser cómplice del negocio, aunque nos digan que existe autorregulación y no es ilegal hacerlo.

Y ahí es donde el documental pone su objetivo, en el negocio de la trata. Mezclando una invitación para montar un negocio sencillo y rentable con las historias reales de mujeres que han sido “utilizadas y engañadas” para ello. Para el negocio, para el de las mafias organizadas en todo el mundo, a las que el beneficio generado les hace millonarios, también millonarios de crueldad, engaño y esclavitud sexual.

Un documental imprescindible, necesario para sensibilizarnos, sensibilizar y llegar a la gente, la de aquí y la de los países en los que se ha grabado, porque debemos dejar de “mirar hacia otro lado” como hacemos en muchas ocasiones y ante muchas situaciones injustas. Las imágenes, sus voces contra la trata, se graban en nuestro corazón, nuestro apoyo es clave.

Debemos implicarnos y ver el documental puede ser el comienzo de una lucha conjunta para que la “trata de personas” deje de ser un negocio y una violación de los derechos humanos.

#contralatrata